Keep it ugly

Hoy estaba leyendo una revista, perdón, dos revistas de esas para adolescentes que lo único que pretenden es venderte y venderte. Ese tipo de cosas suelo hacerlo más porque estoy aburrida que porque en realidad disfrute de la lectura de ese gastadero de papel. Que no me escuchen mis compañeras de colegio, con sus "TKM" o sus "Parateens"... Well, whatever, vamos al punto que a mí me disparó a escribir esto. No hay vez que no tenga a mano una revista de esas (ya sea de grandes o de adolescentes) que no vaya a la parte donde recomiendan CD's, libros y películas. Claro, ahora ya no me sorprende que siempre me encuentre con la misma mierda. Entonces me acordé: "están para venderte, Ana".

En CD's... Bueno, ahí no me acuerdo qué había. En películas: Never say never. En libros: uno que no me acuerdo el título (dato que evidencia lo poco que me interesó) pero que lo había recomendado Stephanie Meyer, y eso estaba resaltado como si sus recomendaciones fueran las de... ¿Borges? No sé a ustedes—no entiendo por qué carajo escribo "dedicado" si no tengo ninguna certeza se que alguien vaya a leerlo—pero a mí eso me genera frustración. I mean, la sociedad de ahora es bastante consumista y "ciega", y este tipo de cosas promueven aún más a que cada vez nos ahuequemos más. Nada, nada con una historia, un buen contenido, un mensaje. No, no les recomiendan libros de Sábato, de Borges, de Shakespeare, de Cortázar, de King... No, creo que voy a seguir esperando toda la vida si pretendo ver ahí "Madame Bovary", "Don Quijote", "Romeo y Julieta"... Y ni siquiera eso. Está bien, serán obras de mucha antigüedad, pero siempre se puede rescatar alguna de las modernas que no sea Crepúsculo.

En lo particular soy bastante especial a la hora de lectura. Considero que hay que leer de todo para "abrir la cabeza". Así terminé leyendo novelas del 1800 como "Cumbres Borrascosas" hasta libros basados en la realidad como "Los mitos de la Argentina" que poco tiene que ver con la historia de amor y desencuentros de Catherine y el tan odiado Heatcliff. Dentro de ese abanico de posibilidades podemos pasar por Harry Potter (las 7 entregas más de 6 veces cada una), Orgullo y Prejuicio, El laberinto de la rosa, Emma, Sentido y sensibilidad, Sobre héroes y tumbas (definitivamente la mejor historia que leí hasta ahora), El principito, Ami, El alquimista, la ahora tan odiada por mí "Saga Crepúsculo", incluso de chica solía leer la Biblia como si fuese un cuento más (quizá de ahí haya nacido luego mi odio hacia la iglesia católica)... En fin, demasiada variedad y, desde mi punto de vista, no mantienen una línea que pueda relacionarlos. Y no, no disfruté de todos y cada uno de esos libros. Algunos los leí para "abrir la cabeza", como dije antes.

Una vez escuché que había dos tipos de lectores: el que va periódicamente a una librería, explora y compra un libro porque en realidad le atrae y los que lo hacen porque simplemente vende o escuchó decir—no importa a qué persona—que el libro era buenísimo. Así, plagios como "Twilight" terminan siendo "los más vendidos del momento".

Creo que me alejé un poco de la situación en la que yo quería hacer foco. No estoy intentando dar mi lectura como ejemplo para nadie, de echo deja mucho que desear. Me encantaría tener más tiempo y más plata para vivir de librería en librería, pero no los tengo (ahora estoy pensando en hacerme socia de alguna biblioteca; sí, bien nerd lo mío). Lo que quiero decir es que deberíamos dejar un poco de leer porque un libro vende y empezar a leerlo porque lo que ofrece nos enriquece, nos atrapa, se disfruta. No digo que no sea bueno leer bestseller, de echo yo leí varios; sólo apunto a que hay muchos libros escondidos en las solitarias y olvidadas estanterías de cualquier librería que nos pueden gustar tanto o más que "los más vendidos".

Por lo pronto a las casi 7 de la mañana de este martes, yo me voy a seguir leyendo mi usada y no muy bien tratada edición de "El guardián entre el centeno". ¿Vos, qué vas a leer?